Tercermundismo, desgobierno y el embuste nacionalista

“Ya saben que los jefes de los pueblos los tiranizan, que los grandes los oprimen. ¡Que no sea así entre ustedes!”  

Mateo 20:25-26

Resulta tedioso que élites políticas de países en vías de desarrollo vivan quejándose y usen de tarima de elección el subdesarrollo de su país, sus desgracias, falta de educación de la población, el precario servicio médico, lo mal organizado del tráfico, del desempleo, del trabajo informal, baja calidad de servicios públicos, siendo estas élites las que provocan y conservan estas precariedades porque en base a ellas se mantienen siempre en el gobierno o esperando regresar al mismo.

La nación ha sido unidad de acción colectiva organizada, dirigida por un buen o un mal gobierno en manos de élites político-empresariales, ha sido espacio de redistribución cuando ha habido, el espacio de la explotación, la segregación social con gobiernos que han servido al enriquecimiento de sus élites, encargados de culpar de los males de la nación a “gobiernos anteriores al nuestro”, a los desgraciados que no se portan bien, sin educación, sin higiene, sin amor por el trabajo o al gobierno que indiscriminadamente los explota. En especial, se quejan de enemigos externos. Prácticamente todos los gobiernos latinoamericanos se autoproclaman de una forma u otra antieuropeos, antiamericanos, siendo que en todos los países latinoamericanos, con muy raras excepciones, se ha practicado este pasatiempo.

Las élites de naciones ricas, poderosas, desarrolladas, habrán vivido, en términos económicos, a costa de naciones pobres, débiles, subdesarrolladas. Preguntemos: ¿quién permitió que extranjeros ricos nos explotaran? ¿Quién permitió que vulneraran nuestra soberanía nacional y se llevaran nuestras riquezas, el futuro de nuestros hijos? Simple: nuestras élites, nuestros malos gobernantes que no lo hicieron gratis, sino enriqueciéndose mucho, también. Más que gobernantes, fueron, son, verdaderos ¡vendepatria! Resulta interesante percibir las asimetrías de esta situación. Las élites siempre ganan. Millones a bancos suizos y paraísos fiscales y más poder, directo o indirecto.

Los ciudadanos de las naciones “ricas explotadoras” en el intercambio desigual del comercio mundial, reciben beneficios, pues en sus países se practica cierta redistribución. Trabajan mucho pero gozan de unas claras oportunidades de educación, asistencia médica, un nivel envidiable de seguridad física y jurídica y pueden salir por el resto del mundo con una paridad de divisa favorable. Los ciudadanos de naciones pobres no reciben ningún beneficio en este magnífico banquete.

En las democracias que funcionan, el juego electoral gravita sobre empleo y seguridad ciudadana, física, jurídica y económica. Sobre estos parámetros, con diversas y variadas perversiones, las élites se disputan el poder. Los gobiernos son juzgados por su desempeño en estos quehaceres, no por sus dádivas paternalistas y populistas que tanto abundan en Latinoamérica. Estas democracias, de derecha o de izquierda, son mejores gobiernos para sus ciudadanos electores.

Sabemos que un buen gobierno no se construye de un día para otro, no es cuestión de unos cuantos años. Es difícil corregir el desastre de décadas de desgobierno. Se podrá corregir un poco, pero dar el necesario giro no se hace en poco tiempo. Nuestro caso en Nicaragua resulta un buen ejemplo de lo improbable. La posible y necesaria reforma agraria quedó en la gaveta por presión que las élites explotaron a su favor político y económico. La descarada manipulación jurídica de las inversiones extranjeras, que resulta en bloqueo a la expansión y creación de nuevos negocios para la creación de puestos de trabajo sólidos y durables, se abandona en favor de los opacos y poderosos intereses de las élites gubernamentales y de los grupos sociales privilegiados.

Patean, ensucian la Carta Magna violándola a su gusto y antojo, rechazan investigar actos de corrupción, monopolizan contratos estatales otorgándolos a sus empresas fantasmas. El presupuesto lleno de ayudas populistas directas a familias, sin duda necesarias, llevan a un callejón sin salida. Todo esto apoyado por estas élites políticas y empresariales, haciéndolo en base a seguir la repartición de poderes y beneficios económicos. No hay voluntad política, no se corrige el rumbo, o muy poco para que sea significativo. Vivimos en un mundo donde la corrupción es la vía de obtener riqueza, poder que no se obtiene por los medios tradicionales de trabajo honesto y liderazgo ético y moral. A pesar de ello, tener un buen gobierno continúa siendo esencial en el desarrollo de una patria libre y soberana para todos y no solo para las élites privilegiadas. Está en nuestras manos en esta nueva oportunidad electoral que se avecina, liderar a la ciudadanía para que este cambio se realice de una vez por todas. Las élites políticas que han gobernado tuvieron su oportunidad y la aprovecharon solo en beneficio propio. Politico1979@hotmail.com

Ver en la versión impresa las páginas: 9 A

AVISO IMPORTANTE


Apegados a la libertad de expresión y a las políticas de privacidad de éste sitio web, LA PRENSA procederá a moderar los comentarios de su edición línea a partir del 1 de julio de 2010.

En aras de fomentar un debate de altura entre nuestros lectores, LA PRENSA no publicará comentarios que contengan expresiones ofensivas, imputaciones de delito, acusaciones personales o que inciten a la violencia. En ese mismo sentido, sólo se publicará aquellos textos cuyo contenido esté estrictamente relacionado a la nota objeto del comentario.

LA PRENSA tampoco publicará comentarios escritos en mayúsculas o que hagan enlace hacia otros sitios webs no autorizados y únicamente se publicará comentarios escritos en español.

Los comentarios y opiniones que expresen nuestros lectores no son necesariamente compartidos por Editorial LA PRENSA, ni la empresa se hace responsable por sus contenidos.

Se le solicita a los lectores reportar un comentario publicado que contradiga estas disposiciones a: comentarios@laprensa.com.ni y/o ediciondigital@laprensa.com.ni
Para que sea removido.


Esto lo dice la prensa

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido por favor tu comentario que sea constructivo y evita usar palabras groseras que atenten contra alguna religion o diferencia racial, de usar vocabulario vulgar. Fuera de eso expresate como quieras.